
¿Cómo se conocieron dos seres así?
La respuesta es tan básica que hasta averguenza: por Tinder.
Pero, ya va, si Benito no tiene, ¿entonces? Él acababa de terminar una relación larga (terminaron con él y casi termina con él) y estaba en el bar de siempre con el amigo de siempre sobrebebiendo el despecho cuando el amigo le sugirió Tinder. Antes de que Benito dijera nada, el amigo tomó su celular, se lo instaló y para hacer el chisme corto, Analía le dio match de inmediato para sorpresa de Benito, del amigo y del bartender que estaba echando un ojo a la pantalla.
Quedaron en verse en el bautizo del libro del amigo (olvidaba decir que todos sus amigos son poetas) donde Benito haría la presentación. Así, entre vinos que se toman y quesos que se pican, Analía y Benito se vieron, se hablaron, se conocieron, se gustaron y el resto lo verán en la serie.
Vale la pena.